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no era cierto. “En 1988, cuando compré
el coche, estaba un poco más escéptico
acerca de la promesa hecha por Merce-
des-Benz… Donde hay una G, hay un
camino”, explicó el hombre de 78 años.
CAPACIDAD DE AGUANTE
Desde un comienzo, Günther se había
hecho una idea de lo que él y Otto ten-
drían que soportar en el viaje. Puso toda
su confianza en el modelo germano
para emprender el recorrido de casi 900
mil kilómetros, pasando por carreteras,
barro, caminos con baches, pendientes
pronunciadas y rocosas. Atravesaron,
además, diferentes estados climáticos,
como el asfixiante calor del desierto, el
frío de las montañas y la humedad de la
selva. El todoterreno soportó 3,3 tonela-
das de carga, 500 kilos más de lo estipu-
lado, producto del alimento, herramien-
tas y todo lo que conlleva realizar una
aventura de este nivel.
VIAJES PIONEROS
Antes de emprender el viaje que mar-
caría su vida, el hombre de 78 años ha-
bía hecho un mapa por los lugares que
recorrería. Sin embargo, en el camino
fueron apareciendo nuevos desafíos
y añadió otra línea roja a ese personal
mapa del mundo. La planificación ha-
bía cambiado y se abrían nuevos ho-
rizontes, que se pensaban imposibles.
Así, Corea del Norte, Myanmar y China
también se sumaron a la historia. A es-
tos lugares les llamó “viajes pioneros”.
RELACIÓN MÁQUINA-HOMBRE
Con la historia entre Günther Hol-
torf y el Mercedes-Benz G300 GD, que-
da claro el vínculo que se puede crear
entre un auto y el hombre. La confian-
za que entregó la máquina, fue funda-
mental para realizar el recorrido. Por
eso, cuando en 2014 cruzó la meta en
Brandenburgo, Berlín, para regresar a
Swabia –su hogar– no pudo evitar in-
mortalizar el momento… habían pa-
sado 26 años. “Fue una parada rápida,
con un sello en el pasaporte para de-
mostrarlo y una foto simbólica con el
vehículo en el cruce fronterizo”, dijo el
ex piloto aeronáutico.
DESCANSO Y ELOGIOS
Después de 26 años, llegó el momen-
to de que Otto descanse. Lo hará en un
merecido espacio de honor en el mu-
seo de Mercedes-Benz en Stuttgart-
Untertürkheim, Alemania. También
será inmortalizado por el Guinness
World Records, por su marca mundial
como el automóvil que más países ha
recorrido en el mundo.
GÜNTHER HOLTORF
PUSO TODA SU CONFIAN-
ZA EN EL MERCEDES-
BENZ CLASE G, PARA EM-
PRENDER UN RECORRIDO
QUE PASÓ POR CARRE-
TERAS, BARRO, CAMINOS
CON BACHES, PENDIEN-
TES PRONUNCIADAS Y
ROCOSAS.