Mercedes Benz Edición 68

PARA ALOJAR • AGRITURISMO PIEVE SPRENNA. Località Serravalle, Buonconvento. Tel. +39 0577 808422 ; www.pievesprenna.com . • AGRITURISMO LE CASCATELLE. Località Terme di Saturnia, Saturnia. Tel. +39 0564 620083 ; www.lecascatelle.it . PARA COMER • CAFFÈ FIASCHETTERIA ITALIANA: Precioso bar y cafetería art déco. Piazza del Popolo, 6, 53024. Montalcino. • INTRALCI: Bar y restaurante. Antipasto local con excelentes vinos. Via Dante Alighieri, 53 A. San Quirico d’Orcia. Tel. +39 339 698 4114 . • LA POSTA: Pequeño y local. Buena pasta y producto de temporada. Via Giuseppe Verdi, 14. Catabbio. Tel. +39 0564 986376 • LA VECCHIA DISPENSA: Un tesoro de este lugar. Clásico y de calidad. Via Italia, 31. Montemerano. Tel. +39 0564 602643 31 • IL BARACCHINO DI RODANO: Agro restaurante. Tienda campestre, produc- to natural, elaboración local. También charcutería y algunas mesitas. Strada Provinciale delle Collacchie 158. Pian d’Alma, Scarlino. Tel. +39 339 402 1039 www.ilbaracchinodirodano.it EL AGROTURISMO ES LA ALTERNATIVA PARA QUE- DARSE EN LUGARES MÁS ABIERTOS, CON NATURALE- ZA, POCA GENTE, MANEJADOS POR FAMILIAS QUE TRABAJAN LA TIERRA, LO QUE ENTREGA UN BARNIZ DE TRADICIONES LOCALES ÚNICAS. El interior de la provincia de Siena reúne varios encantos y es buena opción como punto fijo. Está el gran atractivo turístico de la ciudad de Siena, con mucha gente, fotogra- fías por doquier, belleza y cultura indiscutibles. Aunque también hay versiones más reservadas, pero con el mismo hechizo y sello medieval. A 40 minutos hacia el sur se ubica Pieve Sprenna, una antigua casa de campo con siete hectáreas entre la viña, olivos, come- dor y terraza. Tiene casas de dos pisos con habitaciones, otras incluyen cocina y también las hay individuales, con amplios espacios. Hay piscina, caballos y una pequeña granja educati- va. Este es el mundo de la familia Chezzi, los dueños de Pieve Sprenna, agricultores de varias generaciones que hacían vino, aceite, cultivos y que vieron en este negocio un espacio donde trabajar todos juntos. En el restaurante donde todos los huéspedes desayunan y ce- nan, se organizan más o menos así: Annalisa, la madre, hace lo dulce y el padre, Coneri, elabora lo salado, con especialidad en carnes provenientes de animales de libre pastoreo, cocinadas en gigantes cortes a la plancha u otras preparaciones. Las dos hijas atienden a los pasajeros y la abuela ayuda con la limpieza. La cocina cambia todos los días: priman la estación, el producto local, el animal y el queso del vecino, además de la pasta fatto in casa. Tienen vino familiar y ahí mismo están las barricas, prensas y uvas. Lo sirven en botellas transparentes. Además, en la cantina ubicada a un costado del comedor, venden otras botellas provenientes de la zona de Montalcino, el famoso mu- nicipio conocido por la cepa tinta Sangiovese, ubicación donde encontramos todo este tesoro. Hay todavía más sorpresas: parte del complejo armonioso y bello que compraron hace 18 años, es nada menos que una an- tigua capilla del año 1081, de ahí el nombre y el estilo con que se construyó. Hay senderos largos para recorrer con una paz que solo se interrumpe por el suspiro cuando aparece un castello o alguna villa hermosa. No hay ruido aunque los niños corran por el lugar y los atardeceres dan ganas de pintarlos, aunque nunca se haya tomado un pincel. Entonces, pasar un día, una tarde o algunas horas descansando ahí, disfrutando del paisaje, es un verdadero deleite. Otra de sus tantas virtudes es que está cerca de muchos pue- blitos. Se puede partir a Siena o conocer Montalcino, amurallado, antiguo, romano y con el vino brunello como atracciónmuy bien desarrollada con tiendas especializadas y degustaciones varias. Si va a tomar, por supuesto le recomendamos no manejar, pero tranquilo, que desde Pieve Sprenna lo llevan o algo se arregla. Porque quieren sonrisas en sus huéspedes y lo logran sin dudar. Al lado de Montalcino está San Quirico d’Orcia. Precioso, pe- queñito, muy local, antiguo. Tiene restaurantes clásicos y otros actuales, como InTralci, con una barra y una mesa grande al centro (más otras pocas afuera), cocina a la vista y unas brus- quetas de crudo de ciervo como especialidad. Además, está el mercado (donde compran en Pieve Sprenna) con verduras, fru- tas, quesos y una charcutería sensacional. Es perfecto para com- prar todas las tentaciones, porque en el agroturismo la cocina personal es otro plus. Piense en las tablas con salames, pros- ciutto, porchetta y pecorino (que en la zona es todo un tema) que se pueden armar. De hecho, si es un amante del queso, los Chezzi harán que los vecinos Chironi los reciban en su granja quesera, donde se puede ser testigo de casi todo el proceso de elaboración de los quesos, desde que extraen la leche de las ovejas hasta que lo dejan madurar. Y es que aquí todo es así, cercano, abierto, comunitario, lindo y “glotón”. Postales visuales que la Toscana regala en sus verdes meses de primavera.